Las Habilidades Blandas se entienden como “El resultado de una
combinación de habilidades sociales, de comunicación, de forma de ser, de
acercamiento a los demás, entre otras, que permite a una persona relacionarse y
comunicarse de manera efectiva con otros”. Es por esto que se considera como un
componente muy apreciado en la actualidad, pues posibilita el buen
funcionamiento de las organizaciones e instituciones y de los equipos de
trabajo.
Desde esta perspectiva, la información escogida nos permitirá
desarrollar o fortalecer el aprendizaje de estas habilidades aplicando un
modelo muy sencillo, dividido en cuatro etapas; el cual está considerando el
modelo de Abraham Maslow, Psicólogo estadounidense de gran renombre.
El proceso mencionado
contempla las siguientes fases:
INCOMPETENCIA INCONSCIENTE
INCOMPETENCIA CONSCIENTE
COMPETENCIA CONSCIENTE
COMPETENCIA INCONSCIENTE
¿PARA QUÉ NOS SIRVEN LAS
HABILIDADES BLANDAS?
Muchas personas han
escuchado mencionar sobre las Habilidades Blandas, principalmente cuando
asisten a una entrevista de trabajo en estos tiempos se ha convertido en la
admiración de muchas personas, al escuchar estos términos. Pero de manera
general debemos reconocer que este tipo de habilidades las podemos encontrar en
todo momento en nuestros círculos que frecuentamos. Uno de los más conocidos es
en la Comunidad, para esto debemos conocer que es la Comunidad. La comunidad es
un conglomerado de personas que habitan en sociedad bajo algunas normas
establecidas, con ciertas características generales, como estilo, cultura, y
formas de vida parecidas.
Las Habilidades Blandas son
capacidades comunicativas, de trabajo en equipo, adaptabilidad, empatía, proactividad,
autocrítica y flexibilidad frente a situaciones cambiantes. Además tienen
relación con lo que se conoce como inteligencia emocional; la relación y
comunicación efectiva se ve afectada principalmente por la capacidad de conocer
y manejar las emociones, tanto en nosotros mismos como en los demás. También se
puede utilizar el término de "competencias interpersonales" para
agrupar a estas habilidades en una persona.
Otra forma de enfocarlo, es
diferenciar estas características de lo que se conoce como las habilidades
duras; estas últimas tienen relación con los requerimientos formales y técnicos
para realizar una determinada actividad. Por ejemplo conocer los procedimientos
y modo de operación de una máquina en una fábrica, es parte de las habilidades
duras de una persona. Es importante también no idealizar las diferentes
capacidades o habilidades de cada quien; para algunas labores o funciones las
habilidades blandas tienen una gran importancia (por ejemplo para aquellos
trabajos donde hay una relación directa con el público, o donde se requiere de
mucha interacción con otras entidades, departamentos o personas), mientras que
otros trabajos centran sus requerimientos más bien en las habilidades
"duras" del candidato (por ejemplo, un programador de computadoras).
Cada persona, de acuerdo a
sus características y preferencias, se verá más a gusto en una posición acorde
a su set de habilidades. En cualquier caso, tanto las habilidades blandas como
duras pueden ser desarrolladas. En el caso de las habilidades duras el asunto
es evidente - por ejemplo basta con leer el manual de funcionamiento de una
máquina o dispositivo para desarrollarlas en un cierto ámbito - mientras que
las habilidades blandas requerirán de la voluntad para poner más atención en la
forma en que nos relacionamos con los demás.
Si empezamos a fortalecer y reconocer en nuestro equipo de trabajo a los colaboradores que posean dichas habilidades, pues nuestro direccionamiento mejoraría el rendimiento en el área de competencia respectivamente e incluso en la toma de decisiones dentro de la organización.
.
#PrevenirEsVivir
#PorTúSeguridad
#AsesoramientoEmpresarial
#MSAConsultingGroup
Autor:
MBA. Mauricio Sevilla Avila / Consultor Empresarial